sábado, 29 de octubre de 2011

OTRA BATALLA

Una vez más tenemos una batalla importante. No es una batalla de las que va a decidir la guerra, pero es una batalla muy importante. Es una batalla por el honor, por nuestro nombre, por nuestra historia. El domingo viviremos una de esas batallas que se van a recordar. Que le podremos y deberemos contar a nuestros hijos, nietos y los que lleguen, que se la cuenten a sus bisnietos. Me encantaría que los jugadores de nuestro querido efesé leyeran estas líneas, para que se dieran cuenta de lo importante que es este partido para nosotros. Sobre todo a los Abraham Paz, Kijera, Dimas, Bolado, Anton, Collantes... A esos que son nuevos, porque Txiki, Mariano, Chus y Lafuente ya saben lo que significa esto para nosotros. Aunque confío en la profesionalidad de los nuevos, que últimamente la han demostrado con creces.
Para nosotros, el partido de mañana es una reivindicación de los valores de una ciudad con historia, con principios e ideales. Una Cartagena que ha sufrido auténticos ataques, por la simple razón de defender sus principios e ideales. Hemos sufrido ataques políticos, ideológicos, militares, periodísticos, etc. Ataques de todo tipo, por la sencilla razón de tener un pensamiento propio y no dejarnos llevar por lo que digan los demás. Ataques a cual peor y más despiadado.

No somos un pueblo, somos una RAZA. Somos distintos a todo lo que nos rodea. Ni mejores, ni peores, DISTINTOS.

Desde que un grupo de humanos, probablemente dentro de un clan familiar se fijara en las posibilidades de una zona privilegiada y fundara un poblado llamado Mastia, hemos crecido, a pesar de los ataques recibidos, probablemente por la envidia de ser un pueblo privilegiado. Nos han dado por todos sitios, y no sólo hemos seguido siendo un referente mundial, en cuanto a sostenibilidad se refiere, si no que en todos los continentes del mundo nos han querido copiar, fundando ciudades con el nombre de Cartagena. Ciudades privilegiadas y preciosas, pero CARTAGENA sólo hay una. CARTAGENA DEL LEVANTE ESPAÑOL. Abrigo de marineros y navegantes, objetivo de gente en busca de riqueza, paz, tranquilidad y privilegios.

Ahora vivimos en un tiempo de paz bastante prolongado y es una oportunidad única para que nos desarrollemos como nos merecemos, gracias a nuestros recursos naturales y a nuestro potencial, pero la envidia de un poblado sin historia, sin recursos y con gentes de mal vivir (como nos describe su breve y vergonzosa historia), nos quitó el poder político de forma ruín y nos oprime y nos roba de una forma descarada y continuada.
Nuestra única forma de demostrar nuestra superioridad es con nuestro querido efesé. Demostrando que las gentes de aquí con menos apoyos políticos y menos recursos, por los constantes robos, somos superiores por nuestra raza milenaria. Estamos muy por encima de esos ladronzuelos, que en otros tiempos iban con pañuelo al cuello y trabuco en mano y ahora visten de traje y corbata, aunque se sabe de donde vienen por su forma de actuar.

Ahora, como antes y como siempre...


¡¡¡A POR ELLOS!!!


1 comentario:

Anónimo dijo...

LOS MURCIANOS REALMENTE NO NOS ODIAN.......SE ODIAN A ELLOS MISMOS PORQUE CARTAGENA ES EL REFLEJO DE TODO LO QUE ELLOS QUISIERAN SER................

FDO:Periko